Volvió el festival Quilmes Rock, y este fin de semana
que pasó se desarrollaron sus primeras dos fechas.
El Quilmes Rock 2025 es la 12va edición de una
convocatoria musical de grupos y solistas nacionales e internacionales que se
empezó a hacer en Buenos Aires en septiembre de 2003. Dentro de los años que
lleva este evento de conciertos hubo una edición, la tercera en 2006, en que se
trasladó a Córdoba y Rosario, y la décima en 2020 en que debido a la pandemia
se efectuó en modalidad streaming. En el caso de esta nueva entrega, al igual
que en su edición anterior del año 2022, se ubicó en el inmenso predio de
Tecnópolis en Villa Martelli.
Con headliners ilustres de distintas generaciones:
Andrés Calamaro, Miranda!, Dillom y Las Pelotas (primera jornada), Los
Fabulosos Cadillacs, Seru Giran “El Homenaje” y Ratones Paranoicos (segunda
fecha) y para el próximo fin de semana, Babasónicos, No Te Va Gustar, Rata
Blanca y Los Auténticos Decadentes y para el día de cierre Los Piojos, además
de decenas de otras bandas, la oferta de shows despertaban gran interés; por
los nombres ya consagrados y por poder ver un variado seleccionado de bandas
más recientes.
Recibí una acreditación para cubrir la fecha
inaugural, la del sábado 5 de abril, así que ahí fui dispuesto a embriagarme de
música, preparado para un largo día que se iría convirtiendo en noche y un par
de zapatillas resistentes.
Había un gran problema: cinco escenarios que iban a
desarrollar su programación de manera casi conjunta en una franja horaria que
iba desde las 14.35 hasta las 0,30 horas. Había que elegir, y con ansias de ver
tanto a un legendario como Calamaro, como de poder conocer artistas más nóveles
me dejaba en una situación de corridas y en varios casos de resignación al
saber que de ninguna manera iba a llegar a ver a algunas bandas que quería
escuchar.
El ingreso es por la Avenida Juan Bautista de la Salle
al 4500, al lado de la Avenida General Paz. Tras mostrar la entrada virtual y
el cacheo rutinario ya estaba en el predio, recibido por un enorme dinosaurio y
el cartel de Bienvenidos brillando desde el led en el marco de la gran entrada.
Rodeado de carteles, obviamente, con el nombre del festival y otros con frases
alegóricas al rock vernáculo atravesé la primera parte del ingreso y junto con
el resto del público empecé a recorrer largas cuadras sonorizadas por
highlights en la historia del festival. Allí se escuchaban por ejemplo a Charly
refiriéndose a la lluvia que cubrió su particular performance en 2004, la voz
de Andrés Ciro Martinez o a Ricardo Mollo “haciendo señales” convocando al
escenario de River a los ex Sumo en 2007. Sobre un costado descansaba un enorme
cisne blanco promocional de Miranda! quienes anunciaban su show de noviembre
nuevamente en Ferro y unos pasos después un simpático inflable de un oso que
aparecía desde el techo de un stand de los desodorantes Axe en donde había fila
para participar por premios.
Sobre el costado izquierdo se divisaba la cúpula
blanca de un pequeño domo que en su interior aloja el anfiteatro y escenario
Enigma. Recorrido ese camino hasta el final llegaba la bifurcación; yo fui para
la derecha, la zona en la que se encontraban los escenarios Geiser y Popart. En
este último estaban por comenzar Francisca y Los Exploradores, a las 15,10
horas, mientras que en el escenario Quilmes, uno de los dos principales junto
con el Rock ubicados uno al lado del otro, la banda Hipnótica ya había dado el
puntapié inicial de esta edición del festival.
Francisca y Los Exploradores, banda indie liderada por
Franco Saglietti, surgió hace más de una década. Este año publicaron el single
“Un rato más” y se encuentran presentando Deseo,
su quinto álbum, editado el año pasado. No los había visto en vivo antes aunque
me es familiar la tapa de su disco (salió en vinilo) Franco aparecido en 2016. Muy interesante sonido pop rock a
disposición de buenas canciones. A esa hora la gente todavía estaba llegando
así que la concurrencia en el escenario Popart era mediana no obstante
Francisca … tenía un público seguidor que se sumó en los temas más conocidos
(“Aspirinas” por ejemplo). Vi completo el recital del septeto y me dispuse a
llegar a ver lo que pueda de Jinetes en el escenario Enigma.
Jinetes, quinteto que cuenta con Santiago Echenique en
guitarra y voz, provienen de Córdoba y tienen tres discos publicados. Lo suyo
es el rock y un despliegue enérgico. Pude presenciar los últimos dos temas. Por
lo que llegué a ver su propuesta fue muy bien recibida por el público que agitó
banderas, cantó y saltó. Recordemos que este escenario es el único cubierto y
que dispone de asientos; situación que fue aprovechada perfectamente por la
banda dejando un sticker y flyer con código QR por cada ubicación.
Raudamente empecé el recorrido por el camino al sector
bautizado “Escenarios principales” para ver un poco del show de Zoe Gotusso que
ya estaba teniendo lugar en el escenario Quilmes. Zoe, a quien vi haciendo
baladas, bossa nova y género canción, fue literalmente la cantante de mayor
presencia en esa tarde/noche en Vicente López.
Fue parte del grupo Salvapantallas y lleva dos discos editados como
solista: Mi primer día triste y Cursi. La conexión con la gente la
llevó a invitar a una integrante del público a compartir un tema en el gran
escenario.
Dirigiéndome a la salida de ese sector me crucé por
primera vez con el colega (en el periodismo, la radio y el fanatismo por KISS)
y amigo Axel Orcaizaguirre. También venia rápidamente, en su caso para ver el
set de Estelares quienes en minutos iban a dar el segundo concierto del
escenario Rock. Así como quedamos en vernos un rato después, estuve en contacto
con otra colega quien estaba haciendo valla para ver al Salmón, para el cual
faltaban algunas horas.
Con respecto a la comida y bebida, como en otros
festivales, la forma de pago es a través de la aplicación en la que se lleva
cargada la entrada. Hay que pasar por un sector de cajas en donde se paga y en
el QR de la aplicación te cargan el monto. Ahí sí se puede pasar por los
puestos para comprar lo que se necesite. En mi caso me aseguré un par de aguas;
una para ese momento y otra para tener para más adelante. Mientras tanto oía el
comienzo de la banda platense liderada por Manuel Moretti. De experiencia en varios
escenarios, entre ellos el del Quilmes Rock, lucieron hits que poblaron las
radios y medios en estos últimos veinte años. Me acerqué a presenciar tres
temas antes de ir al único escenario que me faltaba conocer: Geiser. Ahí estaba
haciendo su set Odd Mami. De nombre Helena, esta joven front woman que empezó a
hacer sus temas en 2019, cantaba y tocaba el bajo junto a un baterista y dos
guitarristas, con un repertorio, por lo que llegué a ver, de potente pop.
Claramente había público que la conocía bien y fueron varias las gargantas que
corearon sus temas ¡y hasta hubo pogo!
Pasadas las 17 horas hice unos metros para volver al
stage Popart para ver, también por primera vez en vivo, a Juan Ingaramo. Por
cierto, me alegró ver en estos escenarios, supongo que en la parte de los
principales también las habrá habido, rampas para discapacitados para que
quienes tuvieran capacidades reducidas pudieran tener un sector elevado desde
donde poder ver mejor y tranquilos. He ido a otros recitales, Paul McCartney en
River meses atrás por ejemplo, en donde parece ser que no consideraban relevante
algo tan importante y que denota respeto.
El cantautor, instrumentista, actor y productor
cordobés puso ritmo pop. marchoso y carisma mientras atardecía. Tiene varios
discos publicados, como Pop nacional
de 2014, Músico (2016), Best seller (2018), La Batalla (2021), el ep Summer Pack (2022) y su más reciente Welcome to Cordoba City de 2023.
En un tema invitó a compartir el escenario a su
coterránea Zoe Gotusso.
Al finalizar el set una vez más me crucé entre la
gente con Axel Orcaizaguirre, autor del canal de periodismo musical KX
Contenidos en YouTube y co-conductor de Alta
Fidelidad que sale por Zonica Más los viernes de 17 a 18 horas. Dado que
los dos teníamos previsto ver a Hilda Lizarazu, quien en instantes haría lo
suyo en ese escenario, compartimos el resto de la jornada con nuestras
coberturas.
Hilda Lizarazu se encuentra presentando desde el año
pasado su cd y vinilo homenaje a Garcia Hilda
canta Charly con Lito Vitale en teclados y banda. Este show en el Quilmes
Rock fue un paréntesis en donde repasó parte de su carrera solista. A las 18,05
la autora de “Hadas del mar” subió al escenario con una banda a la que bautizó
Las Trompas de Falopio. Más adelante contó que hasta el día de ayer estuvo
afectada de la voz y que con ayuda de enfermeros (“No los de Charly”) pudo
cantar esa tarde. La verdad es que se la oyó muy bien. Comenzó el beat de “X-puesta”
e Hilda empezó a cantar esa canción que le dedicó a la fotógrafa Andy
Cherniavsky, colega de ella, además. Siguió con un viaje a su segundo cd
solista con “Palermo Hollywood”, continuando con “Lucia la equilibrista” de su
disco Las vueltas de la vida de hace
diez años. Muy importante la sección de vientistas en este tema. De vuelta a
2022 hizo “Benteveo” con una dedicatoria especial al artista Carlos Masoch,
quien falleció días atrás. Volvió a Hormonal
para hacer la bella e hipnótica “La lluvia”. Tan inesperado como feliz fue el siguiente
momento del recital cuando Hilda anunció a su invitado, nada menos que Tito
Losavio. Como todos sabemos, Hilda + Tito = Man Ray, banda legendaria que
lideraron entre 1987 y 2000 y que tuvo una breve reunión durante seis meses
entre 2013 y 2014. Hicieron “Sola en los bares”, ampliamente cantada por la
gente. Luego Hilda volvió a liderar la banda y esta vez le tocó el turno a su
cd Futuro Perfecto y tocó una de sus
grandes canciones menos conocidas, el blues “Compromiso”. Entrando en la parte
final de su set hicieron “D10s”, quizás su tema solista más difundido cuya
letra goza de una lamentable vigencia. La segunda y última participación
especial fue la de su hija Mia Folino. Muy elegantemente lookeada la flamante
solista, quien acaba de publicar su debut Fuga,
compartió la interpretación de uno de los temas más representativos de Parte de la religión “Buscando un
símbolo de paz”, tal como lo hacen en la gira de tributo a Charly. El final
llegó con una nueva incursión del gran Tito para hacer “Caribe sur”.
Rápidamente nos acercamos para ver el comienzo de
Pacífica en el escenario contiguo. Inés Adam y Martina Nintzel lideran esta
propuesta, que contó con un baterista. Cantan en inglés y un sonido que me
lleva a los 60, el sonido que luego se conoció como garage. Me gustaron. Tienen
gran repercusión en el exterior. Publicaron Not a cover band (2022),
Freak Scene (2023) y algunos singles y eps. Presenciamos los primeros
temas, hasta una versión de “Please me” de Poncho y partimos a ver buena parte del
show del ¿ex? Illya Kuryaki and The Valderramas Emmanuel Horvilleur. Show muy
concurrido. En una puesta muy pop Emmanuel hizo temas como “Llámame”, “Tu
hermana” (2007), una canción que dedicó a Gustav Cerati “19”. En su interacción
con el público consultó sobre cuál sería el artista al que irían a ver después
y confundió, aunque se corrigió en seguida, el festival Quilmes con el Cosquín.
“Amor loco” lo compartió con la gran invitada de los shows ese día, con Zoe
Gottuso. Para finalizar una de los Illya Kuryaki “Jugo” y uno de sus hits
“Radios”.
Llegando a las 20 volvimos a recorrer el camino
delimitado por paneles de madera estenciliados
con los nombres de las bandas participantes del festival con rumbo a los
escenarios principales. En el stage Quilmes promediaban su presentación Las
Pelotas. A lo lejos se dejaba oír Gabriel Dahbar cantando “Veoyover”. Mientras resolvía
achicar el crédito restante de la app con una gaseosa (después me dijeron que
la plata que todavía quedaba acreditada iba a estar disponible para retirar a
partir del 14 de abril y que tenía que ingresar a la página del Quilmes Rock y
no sé qué). Las Pelotas ya tenían bien caldeado el clima con “Día feliz” y
“Shine” (también con Dahbar en voz) y poniendo un gran moño con la clásica
“Bombachitas rosas”. Me hubiera gustado presenciar el set completo de la banda
de Daffunchio y cia, pero al menos a la distancia disfruté de este puñado de
temas. A grupos como Vilma Palma e Vampiros, Mujer Cebra, Rayos Laser o las
presentaciones de Paul Higgs, Lobel o Fernando Ruiz Díaz no los pude llegar a
ver.
Apostados frente, aunque a muuuucha distancia, del
escenario Rock llegaba el momento del plato fuerte, del Abuelo de la Nada y Rodríguez,
el gran Andrés Calamaro.
Antes, en pantalla, apareció Pity Álvarez, preso desde
hace algunos años por homicidio, diciendo que se moría por estar en esta
edición como artista y como público, y diciendo que hay que esperarlo un poco
más.
Tras una breve puesta a punto de teclados (un moog que
sonó tan 80s!) Calamaro saludó a Buenos Aires y tras la marca en las baquetas
del baterista Andrés Litwin rompieron el fuego con una pesada carga de rock
bautizada “Input Output”, tema que fue puerta de entrada al universo del
quíntuple El Salmón. Andrés se encuentra en medio de su
gira Agenda 1999, que vuelve al
calor del vivo varios temas de su doble Honestidad
brutal lanzado en aquel año. El concierto de esta noche en el Quilmes tomó
una parte de ese show, aunque hubo un par de cambios, sobre todo en el
comienzo. Nuevamente la batería, esta vez mediante un redoble más que conocido,
introdujo al clásico de 1993 “Sin documentos” perteneciente a la etapa de Los Rodríguez.
Acá se hicieron notar dos nuevos integrantes: la sección de vientos de Kid A
(trompeta) y Pablo Fortuna (saxo) haciendo la línea que en el original
pertenecía a las guitarras. La versión fue hecha un poco más baja que en su
tonalidad original. Pura fiesta y canto al unísono que no disminuyó para nada a
continuación con el funky soul “Loco” de Alta
Suciedad. Además de los brasses amenizaban las teclas de Andrés y de Germán
Wiedemer.
Acá es donde empezó el bloque dedicado a Honestidad … con hits y temas que están
más presentes en los fans que en el público general. El primer corte del disco,
“Te quiero igual” dio paso al envolventemente tenso “Clonazepán y circo”.
Andrés manifiesta su apoyo a Álvarez, a propósito del video proyectado minutos
antes de su show, afirmando que “te estamos esperando”.
Un deep cut, “Un rayo”, antecede al tan melancólico como
melodioso “Cuando te conocí”.
Del fin de la década volvieron al comienzo por un tema
para hacer “A los ojos”, también de Los Rodríguez.
La afilada y rabiosa “El día de la mujer mundial”,
primer opus de Honestidad brutal,
lució envuelta en el comienzo y final por el indestructible misil zeppeliano
“Kashmir”. Siguió la balada con cadencia de bossa nova “Los aviones”, tema que
también fue parte del repertorio hace 20 años cuando Andrés volvió a los
escenarios en aquella triada de Luna Parks documentados en el disco El Regreso. En el final de la versión
actual hay una cita a “El ratón” de Cheo Feliciano.
Justamente la siguiente canción fue “Tuyo siempre”,
original de El Salmón, pero en su
versión de 2005 en tiempo de cumbia y estrenada con Bersuit Vergarabat la banda
que lo secundó por ese tiempo de rentrer.
Incluyeron una coda con la frase melódica de “Mil horas” de Los Abuelos de la
Nada.
Siguieron “Cuando no estás” de Bohemio (2013), nuevamente del primer disco de Los Rodríguez, Buena suerte, su primer hit ibérico “Mi
enfermedad” y un bloque correspondiente al emblemático Alta suciedad que empezó con “Me arde”, en donde rugieron las
guitarras de Brian Figueroa y Julián Kanevsky. Nos sumimos en la emotividad y
la identificación en el desamor de “Crímenes perfectos”, siempre cantada a voz
en cuello por la multitud y en donde pudimos apreciar un poco más el toque
categórico de Mariano Domínguez en el bajo, seguida por “Alta suciedad” y el
infaltable “Flaca”. El cierre oficial
fue con “Paloma”, en donde Kanevsky una vez más se lució con uno de sus magistrales
solos, y la gente se hizo cargo de una buena parte de la letra.
Los esperados bises vinieron con “Estadio Azteca”,
“Los chicos”, solos tremendos de ambos guitarristas y con un final tomado
prestado de The Beatles del tema “I want you (She´s so heavy)” y el enganche con
un fragmento de “El salmón” para clausurar su elogiada performance.
Minutos después, en el escenario Quilmes, tuvo lugar
la llegada de la banda de Ale Sergi y Juliana Gattas, Miranda!
Ale y Juliana llegaron arriba del imponente cisne y
cantaron toda la primera canción ahí mientras arribaban al escenario. Sabía que
íbamos a alcanzar a ver sólo una parte ya que teníamos decidido cerrar la
jornada en el escenario Enigma. Empezaron con “Ya lo sabía”, “Nadie como tú” y
el tercer tema fue “Lo que siento por ti”, pertenecientes a los discos del
periodo 2009/2014. En 2023 Miranda! publicó Hotel Miranda! en donde le dan una nueva mirada a sus grandes éxitos
y los reversionan con invitados. De ese disco fue tomada la versión del
siguiente tema que fue “Uno los dos” a dúo con la cantante Emilia Mernes. Al
estilo de Soda Stereo Gracias Totales,
la gira que hicieron Zeta Bosio y Charly Alberti, la invitada estaba registrada
y se veía en la pantalla. Siguió otro tema compartido “Triste”, el primer
single editado en marzo y compartido con Conduciendo Rusia, y que es uno de los
adelantos del futuro Nuevo Hotel
Miranda!. La voz protagónica la tomó Juliana y cantó “Puro talento” de Magistral. Más duetos; “Por ese hombre”
con Abraham Mateo y “Tu misterioso alguien”. Cuando empezó supuse, asi como en
el disco la hacen con Andrés Calamaro, que la sorpresa seria que compartieran
el escenario realmente en vivo siendo que Andrés acababa de finalizar su show.
Pero no, la imagen y la voz de Calamaro también salieron de la pantalla. Mientras
poníamos rumbo al siguiente y último destino de la noche escuchamos un par de
temas más; dos de El disco de tu corazón
“Perfecta” y “Prisionero”.
Llegados y ubicados en el anfiteatro cubierto bastaba
esperar a que diera la hora en que Leo García, el milagro del pop y del dance;
ese cantante, compositor y guitarrista que abrevó tanto de artistas ochenteros
como Cerati, Virus o Daniel Melero como del rock de los 60 y 70 como Tanguito e
Invisible, nos diera la caricia de su voz, ritmo y guitarra. Los presentes lo esperaban con algo de euforia
y lo aplaudieron fuerte cuando Leo empuñó su guitarra y con base en
programaciones empezó su set con “Isla” del disco Mar. El primer homenaje a Gustavo Cerati que hizo, recordemos que
Leo tocó en su banda en la época de Bocanada
y fue un Soda Stereo por derecho ganado en la inolvidable gira del regreso en
2007, fue “Prófugos” del disco Signos
del año 1986. Siguieron tres de sus grandes canciones pertenecientes al primer
lustro del nuevo milenio: “Romance”, “Tesoro” y “Morrissey”. Fervor total entre
la concurrencia. Luego invitó a compartir el set a Gastón Satragno. Gastón es
un precursor de la música tecno y electrónica en Latinoamérica. A mediados de
los 80 junto con su hermano Leonardo “Leo” Satragno formaron el grupo El Signo,
que en los 90 tuvo gran repercusión. Leo anunció que juntos iban a hacer un
clásico y se lanzaron a interpretar el contagioso y bailable “Podés seguir sin
arriesgarte” del disco Undermalabia
de El Signo, tema de 1989. Gastón en teclados siguió en escena para “Reírme más”.
Las últimas canciones fueron “Cuarto creciente” y otra vez de Gustavo, esta vez
de su etapa solista “Cosas imposibles”. Admito que me hubiera gustado escuchar
una o dos canciones más; una “Isla del sol” por ejemplo. Leo con toda
amabilidad se acercó a saludar y sacarse fotos a un costado del escenario
minutos después.
Con el diario del lunes, o más bien del martes, hoy podría
decir que tendría que haberme hecho una escapada para ver una parte de Zuker XP
en uno de los escenarios principales, o a Ryan en el Geiser, pero me esperaba
una larga caminata hasta la salida y otro tanto para el colectivo así que
emprendí el regreso.
Conclusión: Pasé un muy lindo día. El festival contó
con un gran número de artistas cordobeses de nuevas generaciones. Los clásicos
convocaron multitudes, se habla de unas 50.000 personas para esa primera fecha,
pero los más recientes también empezaron a cosechar un público que por lo que
vi convive y disfruta de las propuestas que ya tienen hojas indispensables en
la historia de nuestro rock. Más allá de que si hubo algunos artistas que no
eran estrictamente rock, yo presencié lo que describí arriba y reinaron las
canciones. Que así siga; que sean canciones, contenidos y rock. Espero poder
ser acreditado en futuras ocasiones.
Reportó: Sebastián
Matatagui
Muchas gracias Diego Perri, T&T Group y Alta Fidelidad.
Excelente y detallada crónica de semejante jornada que hemos tenido la suerte de presenciar juntos, querido amigo. Espero que vivamos juntos muchos recitales más. Un abrazo y aguante La Bandeja!
ResponderBorrarUn gran placer compartir una tarde/noche de buena música estimado. Que sean muchos shows más. Un abrazo grande y vamos Alta Fidelidad y KX!!!
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